espíritu inquieto

Tengo sueño, mucho sueño. Hace días que no duermo bien, me siento muy pero muy cansada, pero debo seguir, ya falta poco. Sólo dos pasos, y llegaré a la meta final. Sin embargo, tiene algo de lindo el sueño alterado, esa especie de satisfacción que se da cuando te quedás dormida, aún siendo arriba del sesenta, y despertás con una sonrisa. Si, una sonrisa, porque soñé con vos, que, estando yo sentada, había un corte de luz y aparecías por detrás, me abrazabas, me mirabas a los ojos y desaparecías. Y aunque había salido tarde, llegué temprano. Espero esta noche, volver a soñarte. Quiero despertar mañana con una sonrisa.